¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS A TODOS!!

¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS A TODOS!!
- 22 de marzo de 2015, "Mis lecturas" y yo, cumplimos nuestro segundo año compartiendo eso: lecturas; mejor decir, comentarios de lecturas. En veinticuatro meses han pasado por esta "casa" 23.579 personas.
- 22 de marzo de 2018, tres años después, nos han visitado un total de 62.545 lectores.
- 22 de marzo de 2021, sumamos un total de 92.934 lectores.



¡¡GRACIAS A TODOS!!

martes, 17 de marzo de 2015

Bartleby el escribiente, Herman Melville



Título: Antología del Cuento Norte-Americano

Autor: Varios Autores

Género: Relatos breves (y no tan breves) 

Editorial: Galaxia Gutemberg / Círculo de Lectores

Seleccionada y prologada por Richard Ford.

Presentada por Carlos Fuentes.

Se trata de un volumen que no puede ser resumido de una sola vez, dado el número de autores y de obras -que se reseñan a continuación-, así como de la disparidad de las mismas.

AUTORES QUE COMPONEN ESTE VOLUMEN Y TÍTULOS DE SUS OBRAS:

IRVING, Whasington: "Rip van Winkle".
HAWTHORNE, Nathaniel: "El joven Goodman Browm".
ALLAN POE, Edgar: "La carta robada".
MELVILLE, Herman: "Bartleby el escribiente". Traducción de Jorge-Luis Borges.
TWAIN, Mark: "La famosa rana saltarina de Calaveras County".
HARTE, Bret: "Los proscritos de Poker Flat".
BIERCE, Ambrose: "Un suceso en el puente sobre el río Owl".
JAMES, Henry: "El rincón feliz".
CHANDLER HARRIS, Joel: "Free Joe y el resto del mundo".
ORNE JEWETT, Sarah: "Una garza blanca".
CHOPIN, Kate: "Historia de una hora".
WHARTON, Edith: "Las fiebres romanas".
O. HENRY: "El poli y el himno".
CRANE, Stephen: "El hotel azul".
CATHER, Willa: "El caso de Paul".
ANDERSON, Sherwood: "Quiero saber por qué".
LONDON, Jack: "El fuego de la hoguera".
WILLIAMS, William Carlos: "El uso de la fuerza".
LARDNER, Ring: "Corte de pelo".
CHANDLER, Raymond: "Sangre española".
AIKEN, Conrad: "Nieve silenciosa, nieve secreta".
PORTER, Katherine Anne: "Judas en flor".
PARKER, Dorothy: "Una rubia imponente".
THURBER, James: "El lugar del pájaro maullador".
SCOTT FITZGERALD, Francis: "Regreso a Babilonia".
FAULKNER, William: "El otoño del delta".
HEMINGWAY, Ernest: "Allá en Michigan".
STEINBECK, John: "Los crisantemos".
BOYLE, Kay: "Amigo de la familia".
PERELMAN, S. J.: "Hasta el final y bajando la escalera".
PENN WARREN, Robert: "Invierno de moras".
O´HARA, John: "¿Nos marchamos mañana?".
WELTY, Eudora: "No hay sitio para tí, amor mío".
BOWLES, Paul: "Un episodio distante".
CHEEVER, John: "Oh ciudad de sueños rotos".
SHAW, Irwin: "Las chicas con sus vestidos de verano".
SCHWARZT, Delmore: "En sueños empiezan las responsabilidades×.
ELLISON, Ralph: "El Rey del Bingo".
MALAMUD, Bernard: "El barril mágico".
TAYLOR, Peter: "Venus, Cupido, Locura y Tiempo".
PALEY, Grace: "conversación con mi padre".
VONNEGUT, Kurt: "Bienvenido a la jaula de los monos".
GASS, William H.: "El chico de Pedersen".
BALDWIN, James: "Los blues de Sonny".
O´CONNOR, Flannery: "El negro artificial".
YATES, Richard: "Mentirosos enamorados".
ELKIN, Stanley: "Una poética para bravucones".
BARTHELME, Donald: "El levantamiento indio".
UPDIKE, John: "A & P"
ROTH, Philip: "La conversión de los judíos".
MICHAELS, Leonard: "Chico de ciudad".
CARVER, Raymond: "Tres rosas amarillas".
MUKHERJEE, Bharati: "El manejo del dolor".
WIDEMAN, John Edgar: "Papi basura".
HANNAH, Barry: "Testimonio de un piloto".
DYBEK, Stuart: "Chopin en invierno".
FORD, Richard: "Optimistas".
WILLIAMS, Joy: "Tren".
WOLFF, Tobias: "El otro Miller".
BAUSCH, Richard: "Valentía".
O´BRIEN, Tim: "Las cosas que llevaban".
BEATTIE, Ann: "Hora de Greenwich".
CORAGHESSAN BOYLE, T.: "El Lago Grasiento".
KINCAID, Jamaica: "La mano".
MOORE, Lorrie: "Como la vida".
---o0o---


La obra a comentar es la titulada: "Bartleby el escribiente"

Autor: Herman Melville  

Traducción de: Jorge-Luis Borges

Género: Relato realista

Páginas: 20



FRASES QUE ME HAN GUSTADO

- “[...] un exceso de avena es perjudicial para los caballos”.

- "Nada exaspera más a una persona seria que una resistencia pasiva. Si el individuo resistido no es inhumano, y el individuo resistente es inofensivo en su pasividad, el primero, en sus mejores momentos, caritativamente procurará que su imaginación interprete lo que su entendimiento no puede resolver”. (Pág. 95)

- “Recordé las sedas brillantes y los rostros dichosos que había visto ese día, bogando como cisnes por el Mississipi de Broadway, y los comparé al pálido copista, reflexionando: Ah, la felicidad busca la luz, por eso juzgamos que el mundo es alegre; pero el dolor se esconde en la soledad, por eso juzgamos que el dolor no existe" (Pág. 100)

- “Una de las horas más lúcidas y serenas en la vida del hombre es la del despertar”. (Pág. 107)

- “[…] pero no hay hombre, que yo sepa, que haya cometido un asesinato por caridad”. (Pág. 109)

---o0o---


ESPACIO

El espacio, salvo en las dos o tres últimas páginas, está circunscrito a la oficina en la que transcurre gran parte de la acción. Oficina que, el narrador, nos la describe como “un enorme tanque cuadrado”. De vez en cuando se alude a la calle, de pasada y, al final, al césped del patio de la cárcel.

- La oficina: está descrita como un “enorme tanque cuadrado” que, por un lado, “da a la pared blanqueada de un espacioso tubo de aire…” y lo define como un espectáculo “más bien manso”. La vista del otro lado “las ventanas dominaban […] una alta pared de ladrillo, ennegrecida por los años y por la sombra; las ocultas bellezas de esta pared no exigían un telescopio, pues estaba a poco más de tres metros de mis ventanas, para beneficio de espectadores miopes…” (Una clara hipérbole). Indudablemente, el lugar descrito con minuciosidad y, no por ello, bastante sorna, se hace claustrofóbico, oscuro y acorde con el protagonista: Bartebly.
Es un espacio dividido en dos por una puerta vidriera que, según el humor del jefe, permanecía abierta o cerrada. Una parte está ocupado por los amanuenses y, la otra, por el jefe-narrador. Cuando Bartebly se incorpora a la oficina, al tratarse de un espacio tan pequeño, el jefe –del que desconocemos el nombre-, coloca a su nuevo empleado en un rincón, junto a la puerta, de su lado para tener a mano “a ese hombre tranquilo” en caso de una tarea insignificante.

- De pasada se alude a la casa del jefe, pero no hay descripción alguna de ella; solo sabemos que tiene una casa.

- La iglesia de la Trinidad donde el jefe va, de vez en cuando, porque le gusta oír a un determinado predicador.

- Al final hay “una salida” al exterior: el patio de la cárcel, algo que tampoco es demasiado agradable, ni amplio.

---o0o---

PERSONAJES

En el ámbito del narrador y Bartleby: asalariados del primero y “compañeros” de trabajo del segundo.

- Narrador y co-protagonista – El relato está escrito en primera persona. El narrador nos dice de sí al comienzo de la obra: “Soy un hombre de cierta edad. En los últimos treinta años…”
Se trata de alguien que habla, escribe y conoce bien el “gremio de los amanuenses o copistas judiciales”. Se nos presenta como un abogado sin ambición, pacífico, nombrado para el cargo de Agregado a la Suprema Corte en Nueva York.
No describe prácticamente nada del mundo que le rodea, si no es la oficina –cuya descripción es exhaustiva- y los personajes que están bajo su mando. Alude a su casa, a una iglesia, pero de pasada, como si solo le interesase decirle al lector que tiene otra vida fuera de la oficina, pero que es ajena a ésta.
Lo que más le interesa, lo que le exaspera e intriga, es la vida y forma de ser de sus adjuntos, pero sobre todo, la del recién llegado Bartleby.
Al final del relato el narrador se “gira” hacia el lector y se dirige a él directamente: “Pero antes de despedirme del lector, quiero advertirle que si esta narración ha logrado interesarle lo bastante para despertar su curiosidad sobre quién era Bartleby, y qué vida llevaba antes que el narrador trabase conocimiento con él, sólo puedo decirle que comparto esa curiosidad, pero que no puedo satisfacerla”.

- Bartleby – De este personaje el narrador nos dice que “…a las biografías de todos [los amanuenses], prefiere algunos episodios de la vida de B.”
* Ser del que no se puede indagar nada en su vida.
* El narrador (y los compañeros) solo conocen de él lo “que vieron sus ojos”.
* Aparece en el relato a partir de la cuarta página.
* Lo primero que nos deja “ver” el narrador de él es: “En contestación a mi aviso [cuando demanda un nuevo empleado con motivo de su nombramiento como Agregado a la S.C. de N. Y.], un joven inmóvil apareció una mañana en mi oficina; la puerta estaba abierta, pues era verano. Reveo su figura: ¡pálidamente pulcro, lamentablemente decente,  incurablemente desolada! Era B.” Es una anticipación de lo que nos mostrará después.
Su escritorio está situado junto una ventanita “con alguna luz”, pero sin vista a ninguna parte. Está separado del jefe por un alto biombo verde, aislado de su vista pero al alcance de su voz: caminan juntos sociedad y retiro.
* Es aplicado: trabaja día y noche, escribe “silencioso, pálido, mecánicamente”.
* Voz suave, melodiosa pero muy firme cada vez que habla para decir su muletilla: “Preferiría no hacerlo”.
* Rostro tranquilo, ojos grises, vagamente serenos. El jefe-narrador lo compara con su “pálido busto en yeso de Cicerón”.
* Dócil pero, a la vez, más terco que una mula.
* Jamás se ausenta de la oficina. Ginger Nut era el encargado de llevarle algo de comer: a las 11 de la mañana el chico llega hasta el biombo, luego sale de la oficina y regresaba con un puñado de bizcochos de jengibre (es lo único que come). Bartleby le da un par de ellos, en pago, al muchacho.
* Aplicado, falto de vicios, de laboriosidad incesante, siempre aparenta una gran calma, conducta ecuánime en todo momento.
* Honesto en el trabajo.
* Puntual.
* Guarda sus ahorros en un pañuelo, dentro del cajón del escritorio.
* Vive en la oficina, no lee, mira por la ventana al muro de ladrillo, nunca bebe cerveza, té o, café. Nunca sale a ninguna parte, ni a dar un paseo.
* No se sabe quién es ni de dónde viene, ni si tiene parientes.
* Inofensivo y silencioso como las viejas sillas.

Al narrador le produce sentimientos encontrados. Por un lado le produce una ira incontenible pero Bartleby, al final, la consigue disipar porque le desarma. Le conmueve esa soledad, esa “poca cosa”, le desconcierta.
También dice de él que posee: “una cadavérica indiferencia caballeresca pero muy seguro de sí”. O: “tiene un aire de descolorida altivez o austera reserva”. Las primeras relaciones del jefe-narrador para con Bartleby fueron de melancolía y lástima sincera; luego, según se agranda la desolación del escribiente, la melancolía del jefe se convierte en miedo y la lástima en repulsión.
Según el jefe sus rarezas son involuntarias, pero de vez en cuando “lo aguijonea” para hacerle despertar una chispa de cólera como la que siente él. En un momento determinado hay un diálogo entre ambos y el narrador le llama “mula”, pero el aludido no reacciona.
Para Ginger Nut, Bartleby está un poco chiflado y, Nippers, en su momento de mal humor (durante las horas matutinas), le tilda como el idiota testarudo de detrás del biombo.
Tanto los compañeros como el jefe terminan por adoptar la palabra “preferir”, aunque nunca la hubieran utilizado con anterioridad.
En un momento determinado del relato, cuando el jefe trata de echarlo de la oficina porque tienen que cambiar de edificio, Bartleby se aferra a una frase nueva: “No soy exigente”, porque no desea moverse de aquel lugar.

---o0o---

Compañeros de Bartleby en la oficina:
Dos escribientes – Turkey y Nippers
Un muchacho “muy vivo” para los mandados: Ginger Nut

- John Jacob Astor – Un “finado” del que declara el narrador que su “primera virtud era la prudencia, la segunda el método”. Y del que le gusta hablar para poder repetir su nombre porque es “orbicular”. Bartleby llega a la oficina para ocupar su puesto.

- Turkey - (Se trata de un apodo cuyo significado es: “pavo”).
De origen inglés.
Bajo. Obeso. Calvo.
Más o menos de la misma edad que la del narrador –unos 60 años o no lejos de ellos-.
Con un rostro que sube del tono rosado al rojo del medio día, luego desciende según pasa la jornada. El momento en el que se pone más rojo es cuando su trabajo se vuelve más febril. Se descuidaba al mojar la pluma en el tintero, por lo que todas las manchas de tinta que figuraban en los documentos fueron ejecutados después de las 12 del medio día -¿acaso describe una personalidad bipolar?
Viste trajes grasientos y con olor a comida durante el invierno; en verano, lleva pantalones grandes y bolsudos junto con chaquetas execrables. No se le puede tocar el sombrero.

- Nippers - (Se trata de un apodo cuyo significado es: “pinzas”).
También de origen inglés.
Cetrino. Melenudo. Algo pirático. Sobrio.
Unos 25 años.
Según el narrador le considera víctima de dos poderes malignos: la ambición y la indigestión.
Ambición: porque, a veces, “usurpa” y se mete en asuntos profesionales de su jefe, como puede ser “la redacción de documentos legales”.
Indigestión: lo llama así el narrador a sus rachas de sarcástico mal humor, durante las cuales le rechinan los dientes cuando comete errores al copiar, lanza maldiciones que silba más que habla, tiene un disgusto continuo a causa del nivel de la mesa –nunca está a su gusto-.
Escribe con rapidez y con una letra clara.
Cuando le apetece tiene incluso modales distinguidos: viste como un caballero, “cosa que le daba tono a la oficina”.
La irritabilidad de este personaje y su nerviosismo son más notables de mañana que de tarde (se compensa con su compañero Turkey).

- Ginger Nut – (Se trata de un apodo cuyo significado es: “bizcocho de jengibre”).
Muchacho de 12 años, hijo de un “carrero” –persona que lleva carros- que quería, antes de morir, ver a su hijo en los tribunales mejor que en el pescante de un coche. Estudia derecho pero, además, es: mandadero, barredor y limpiador en la oficina, todo por 1 dólar semanal. Tiene un escritorio que usa poco (en uno de los cajones guarda cáscaras de nuez de muchas clases).

---o0o---

Otros personajes - Extras que conforman el entorno de la obra:
- Bullicio en la calle
- Gentes que visitan la oficina
- Algún procurador
- Clientes de Nickers
- Abogados, testigos, algún letrado
- Un señor preocupado –abogado- que desea quitarse “de encima” a Bartleby…
- Varias personas en la puerta del narrador-coprotagonista
- Hombre corpulento, propietario de la antigua oficina de Wall Street
- Un gendarme, espectadores curiosos formando una procesión
- Asesinos y ladrones en la cárcel
- Despensero de la cárcel
- Monroe Edwards –falsificador muerto en Sing Sing según cuenta el despensero-
- Dos guardias de la cárcel

---o0o---

Algunas figuras retóricas:

* Anticipación: “Reveo su figura: ¡pálidamente pulcro, lamentablemente decente, incurablemente desolada! Era B.”

* Hipérbole: “las ventanas dominaban […] una alta pared de ladrillo, ennegrecida por los años y por la sombra; las ocultas bellezas de esta pared no exigían un telescopio, pues estaba a poco más de tres metros de mis ventanas, para beneficio de espectadores miopes…”.

* Personificación: “Tarde soñadora” – “[…] felicidad de las aturdidas calles”.

---o0o---

ALUSIÓN A PERSONAJES FAMOSOS

- Byron, al que describe como: “…no me magino al ardoroso Byron, sentado junto a Bartleby, resignado a cotejar un expediente de quinientas páginas, escritas con letra apretada”. (Pág. 91)
- Cicerón
- Mario (…”meditando entre las ruinas de Cartago” = Cayo Mario Cayo Mario (en latín Gaius Marius) (Arpino, ca. 157 a. C. - Roma, 13 de enero de 86 a. C.) fue un político y militar romano, llamado tercer fundador de Roma por sus éxitos militares. Fue elegido cónsul siete veces a lo largo de su vida, algo sin precedentes en la historia de Roma.
- Adam y Colt
- Edwards (Jonathan) – “Sobre la voluntad”
- Priestley (Joseph) – “De la necesidad”

---o0o---

MI OPINIÓN

Se trata de una historia realista, con una prosa exquisita (si se tiene en cuenta que el traductor fue J. L. Borges), narrada casi toda ella en primera persona, salvo el final de la misma en la que el narrador se dirige al lector de un modo directo.
A mi modo de ver es un cuento asfixiante por ese espacio cargado, en el que conviven unos individuos, todos ellos varones, a cual más extraño. De hecho, la figura femenina está totalmente desterrada de la historia.
El personaje que nos describe lo que sucede en aquella oficina, es decir, el jefe, se esmera en aclararnos con todo detalle cómo es el entorno en el que transcurre la acción; una acción casi inamovible, quieta.
Describe a sus subordinados, sobre todo a Bartleby, pero solo nos puede contar lo que ve, su aspecto físico, su manera de ser a través de las respuestas que le da cada vez que requiere sus servicios… Pero muy poca cosa más.
Da la impresión de que, fuera de la oficina, los personajes no tienen vida propia.
El mismo narrador es un desconocido, sólo sabemos de él lo que nos dice al principio: que ronda los sesenta años y que tiene una oficina. Algo más adelante apunta que tiene una casa pero no nos dice si vive solo en ella, si está casado, viudo, divorciado, si tiene hijos o no; al igual que Bartleby es un perfecto desconocido. Puede sacarse en conclusión que es como un padre para sus subordinados.
Sabemos, por los sentimientos que le inspira el escribiente, que es una buena persona –aunque también es capaz de enfadarse, pero poco-. Entre sus gustos, el único que nos deja conocer, es que le agrada ir a la iglesia, de vez en cuando, a escuchar el sermón de un predicador determinado y muy poco más.
Es un relato que se podría decir “de las incógnitas”. El lector ha de imaginarse la vida que podría corresponderle a cada uno de los personajes.
Sería un bonito ejercicio de intertextualidad.


---o0o---



BIOGRAFÍA Y OTRAS OBRAS DEL AUTOR.- Herman Melville (1819-1891), novelista estadounidense y una de las principales figuras de la historia de la literatura. Su exploración de los temas psicológicos y metafísicos influyó en las preocupaciones literarias del siglo XX, a pesar de que sus obras permanecieron en el olvido hasta la década de 1920, cuando su genio recibió finalmente el reconocimiento que merecía.
Melville nació en Nueva York el 1 de agosto de 1819, en el seno de una familia en decadencia. En 1837 se embarcó rumbo a Liverpool como mozo de cabina. De regreso a Estados Unidos trabajó como profesor y en 1841 viajó a los Mares del Sur a bordo del ballenero Acushnet. Tras 18 meses de travesía abandonó el barco en las islas Marquesas y vivió un mes entre los caníbales. Escapó en un mercante australiano y desembarcó en Papeete (Tahití), donde pasó algún tiempo en prisión. Trabajó como agricultor y viajó a Honolulu (Hawai), y desde allí, en 1843, se enroló en una fragata de la marina estadounidense. A partir de 1844 dejó de navegar y comenzó a escribir novelas basadas en sus experiencias como marino; participó en la vida literaria de Boston y Nueva York.
Sus cinco primeras novelas alcanzaron rápidamente una gran popularidad. TYPEE (1846), OMOO (1847) y MARDI (1849) están ambientadas en las islas de los Mares del Sur. REDBURN (1849), está basada en su primer viaje por mar, mientras que LA GUERRA BLANCA (1850) relata sus experiencias en el ejército. En 1850 se estableció en una granja cerca de Pittsfield (Massachusetts), donde entabló una estrecha amistad con Nathaniel Hawthorne, autor que ejercería una gran influencia en Melville y a quien éste dedicó su obra maestra, MOBY DICK O LA BALLENA BLANCA (1851).
El tema central de esta novela es el conflicto entre el capitán Ahab, patrón del ballenero Pequod, y la gran ballena blanca que le arrancó las piernas al capitán a la altura de la rodilla. Ahab, ávido de venganza, se lanza con toda su tripulación a una desesperada búsqueda de su enemigo. La obra sobrepasa en mucho la aventura y se convierte en una alegoría sobre el mal incomprensible representado por la ballena, un monstruo de las profundidades, que ataca y destruye lo que se pone en su camino, y también por el capitán Ahab, que representa la maldad absurda y obstinada, que sostiene una venganza personal y arrastra a la muerte inútil a muchos inocentes. La ambigüedad con la que se juzgan el bien y el mal hace de esta novela una heredera de la Odisea de Homero e incluso de la Divina Comedia de Dante.
Moby Dick no resultó un éxito comercial y la siguiente novela de Melville PIERRE O LAS AMBIGÜEDADES (1852), una oscura exploración alegórica sobre la naturaleza del mal, fue un estrepitoso fracaso. Hoy, sin embargo, esta obra goza de cierta aceptación entre la crítica y el público. ISRAEL POTTER (1855), una historia romántica, corrió la misma suerte que las dos primeras.
En el libro de relatos CUENTOS DE PIAZZA (1856) se incluyen algunos de los mejores cuentos de Melville. Destacan especialmente "BENITO CERENO" y "BARTLEBY EL ESCRIBIENTE", así como los diez fragmentos descriptivos de las islas Galápagos, en Ecuador, que llevan por título "LAS ENCANTADAS". La novela inacabada EL TIMADOR (1857), ambientada en un vapor del Mississippi, es una sátira del egoísmo y el materialismo de la época. Entre 1865 y 1866 Melville se ganó la vida como inspector de aduanas en Nueva York. Durante este periodo publicó varios volúmenes de poesía que han sido justamente valorados con el paso del tiempo. Entre estos figuran ASPECTOS DE LA GUERRA (1866) y CLAREL (1876), la historia de una peregrinación a Tierra Santa salpicada de aventuras. En 1891 completó la novela BILLY BUDD, MARINERO, la historia de un joven grumete que representa la inocencia, dominado por un malvado y endurecido oficial que es la personificación del mal. Melville murió en Nueva York el 28 de septiembre de 1891, poco después de completar Billy Budd. Esta obra ha sido llevada al teatro, al cine y a la ópera (1951) por el compositor inglés Benjamin Britten, en colaboración con el novelista E. M. Forster.